Estoy de los 40 hasta los principales

- ¿Tienes novio... Adriana? – Dice mientras fija su mirada en mi pecho, donde está colocada una tarjetita con mi nombre.

- A la 7.

- ¿ a las 7? ¿Sólo lo tienes de 7 a 8?

- Que ya tienes activada la sesión, en la cabina 7.

- Ah, sí...

- 12 minutos, ¿no?

- Sí, sí, ponme a tope la facial, a ver si me quemo.

Le doy su tarjeta y unas gafitas de sol, y mientras se aleja por el pasillo, hacia el solarium facial, se vuelve y me dice:

- Con eso ya puedo entender que tienes novio.

O que no quiero nada contigo, gilipollas.

Siempre suspendía en educación física.

A veces pienso. A veces pienso, punto.

Empieza la hora muerta: las 16.22h. La única persona que está utilizando ahora mismo un solarium, saldra´ en dos minutos. A partir de ese momento, hasta las 17:30h, puede que no venga absolutamente nadie.

Me acompañan los 40 principales, apuntes de historia de la ciencia y un ordenador sin personalidad.

Justo en frente de mí, un pequeño tiovivo cerrado.

Paulina Rubio en los 40. Terminaré acostumbrándome a ella, a Mika y a la pedorra del paraguas.

Cuando escucho canciones de tías como esta, cuyas vidas han pasado por televisión como telenovelas morbosas, me pregunto si la letra ira´ dirigida a tal o cual amante. Paulina, Boffil.... En fin.

28 de agosto. Hace muchísimo calor.

¿Quién querría perder el tiempo achicharrándose en una cabina?

¿Qué clase de gente viene aquí?

¿Para quién estoy trabajando?

Muchas chicas del 79 se hacen bonos de solarium porque se van a casar. Sólo son 10 años mayores que yo. Bueno, 9... ¿Me casaré a los 28?

¿Terminar la carrera y casarme?

¿Para comprar bonos de solarium?