martes, 22 de enero de 2013

¿Quién (no) puede publicar un libro? o ¿Lo llaman editorial cuando quieren decir imprenta?




Ay, joven escritor que quieres ser publicado. Joven escritor que envías tus manuscritos a todos los concursos que encuentras y no ganas. A todas las editoriales que pillas, y no te llaman. Empiezas a lo grande, ay, joven escritor. Envías poemarios a Visor, te presentas al Premio de Poesía Hiperión. Si por ti fuera te presentarías al Planeta. Qué tienen Espido o Boris que no tenga yo, te preguntas. Pero las oportunidades no llegan. Tienes el don de la palabra escrita y has ganado algún concurso literario de tu barrio, pueblo o ciudad. Te han dicho que vales para esto y te lo crees. Te ves firmando ejemplares en la Feria del Libro de Madrid. Envías tu novela breve a Alpha Decay. Si Luna y Antonio pudieron, por qué tú no. Pero Alpha Decay nunca responde. Empiezas a interesarte por las pequeñas entonces, qué remedio. Tu poemario en Ya lo dijo Casimiro Parker, por ejemplo. Pero los Casimiros lo dejan claro en su web: no reciben manuscritos. Tampoco La Bella Varsovia. Y empiezas a hacerte demasiado mayor para aspirar al  premio Pablo García Baena. A este paso no lograrás entrar ni en la residencia de artistas de la Fundación Antonio Gala. El mundo se acaba. 

Tus amigos, esos que se reían de ti en el colegio. Los que fumaban en el baño en los recreos, o mataban gatos al salir de la escuela. Los que se bajaban los resúmenes de los libros en el Rincón del Vago mientras tú leías no solo los obligatorios sino los de la estantería de arriba de casa. Todos, tienen su blog, su poemario de ripio fácil en ISSUU con más de cien mil descargas, o su libro autoeditado sin ISBN made in la copistería de su calle. Tienen su libro en Bohodón previo pago de. Tienen sus libros colgados en Lulu a la espera de compradores. Tienen su libro para e-reader por un euro en Amazon, bajo el sello de una editorial independiente. Tienen su proyecto en Verkami. Todo el mundo es escritor y todos van a terminar con un libro debajo del brazo. Y luego el niño. Y el árbol. Y otras cosas que les sobrevivan. 

Pero, un momento ¿sobrevivirán los libros?


¿Qué está pasando con la edición? ¿Se está convirtiendo todo en un cachondeo? ¿Una gran feria de vanidades? ¿Has dicho "feria"? ¿Con sus tómbolas y sus boletos? 

Joven, aquí tienes la solución: la suerte.

Y es que la editorial QVE (siglas de Que Vayan Ellos), ha lanzado un sorteo muy peculiar desde su página de Facebook:

¿Tienes un poemario o un relato que te gustaría publicar? Edítalo gratis con este sorteo y te enviaremos 50 ejemplares a tu casa para que se los regales a tus amigos, o los comercialices en las librerías de tu ciudad.
El ganador de este sorteo obtendrá la publicación de un libro (suyo o de un familiar o amigo que designe) con las siguientes características:
-Ejemplares para el autor: 50.
-ISBN editorial de Ediciones QVE
-Hasta 64 páginas en Blanco y Negro y papel offset blanco de 80 gramos.
-Cubierta cartulina 250 gramos, en color, plastificada brillo.
-Encuadernación rústica pegado PUR
-Tamaño: 14,8x21 cm.
-Envío a España.
(Nota: El autor conservará todos los derechos sobre la obra publicada: de explotación, de comercialización, etc.)
www.edicionesqve.com

Siempre se dijo: publicar un libro es cuestión de suerte. Que si tener padrinos, que si ser amigo de los editores, que si bla. Pero lo que propone la editorial Que Vayan Ellos va mucho más allá. Convierten el sueño de publicar de los jóvenes e incautos escritores inéditos en un juego de azar.


¡Boletos!

Por cada contacto que invites y haga feedback consigues más boletos, ergo más posibilidades de ganar el sorteo tienes. ¡Es la hora de la fiesta!






Y aquí, en este punto, lanzo mis preguntas. A ti, escritor, que eres joven:

¿Cuánta dignidad estás dispuesto a perder por publicar?
¿Por qué queremos publicar? ¿Por qué ese fetiche por el papel?
¿Qué sentido tiene publicar en una editorial pequeña - desconocida?
¿Y en una editorial de co-edición?
¿Qué sentido tienen las editoriales de co-edición si puedes optar por la auto-edición?
¿Qué opináis de las plataformas digitales de autoedición (Bubok, Lulu...)?
¿Y del Cowdfunding para financiar una publicación?
¿Y qué hay del "prebook" que propone El Cangrejo Pistolero? ¿merece la pena?






;) 

28 comentarios:

  1. Madre de dios cuanta información de golpe.ahora me has dejado loca y como no estoy en eeste mundo muy puesta nose contesar. Tú eres la entendida. A mi me negaron una publicación de mis poemarios amorosos morosos y me quede SIM ganas de nada. Pero bueno.ya vendrán, el que algo quiere algo le cuesta.me di por vencida muy rápido.

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  2. Es una salvajada seguir deforestando los bosques para publicar una obra cuyo único mérito estriba en ser la ganadora de un sorteo. ¿Pero qué es más duro para el alma sensible? ¿Ver como la diosa del Azar recompensa a un pobre juntaletras imprimiendo sus poemas de carpeta u observar como el nepotismo ha triunfado en el microuniverso literario? ¿Hace falta dar nombres? Sí, démoslos:

    Alejandra - Alejandrina - Alexia - Alexandra - Alfonsa - Alfonsina - Alfreda - Ali - Alicia - Alida - Alina - Alionora - Alondra - Alma - Almendra - Almudena - Altagracia - Altea - Amada - Amalia - Amancay - Amanda - Amapola - Amaya - Ámbar - Amelia - América - Amparo - Ana - Anabel - Anabella - Anaclara - Anahí - Anáis - Anastasia - Andrea - Andreína - Ángela - Ángeles - Angélica - Angelina - Angie - Angustias - Ania - Antea - Antonela - Antolina - Antonieta - Antonia - Antonina - Anunciación - Anunciata - Apia - Apolonia - Aquilina - Arabela - Araceli - Arantxa - Aránzazu - Arcadia - Argentina - Ariadna - Ariana - Armonía - Artemisa o Artemis - Aroa - Ascensión - Astrid - Asunción - Asunta - Atala - Atalanta - Atanasia - Atenea - Augusta - Áurea - Aurelia - Aureliana - Aurora - Auxiliadora - Ayelen - Azalea - Azucena
    -Alejandro - Alejo - Alex - Alexandro - Alf - Alfonso - Alfredo - Alonso - Álvaro - Alvar - Amadeo - Amador - Ambrosio - Américo - Amilcar - Anastasio - Andrés - Ángel - Aníbal - Aniceto - Anselmo - Antolín - Antón - Antonello - Antonio - Apolo - Apolonio - Aquiles - Aquilino - Arcadio - Arcángel - Archibaldo - Ariano - Ariel - Aristóbulo - Aristóteles - Armando - Arnaldo - Arquímedes - Arsenio - Artemio - Arturo - Astor - Atahualpa - Atanasio - Ataúlfo - Atila - Augusto - Aureliano - Aurelio - Axel

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  3. Bueno...
    1º/ Publicar en papel es una cosa romántica a la que aspira cualquier enamorado de la literatura. También es una cuestión de ego y por tanto difícil de aplacar de otra manera, digitalmente por ejemplo.
    2º/ En todo esto se obvia una cosa muy importante: la figura del editor. Cuando uno manda una obra a una editorial ha de hacerlo porque conozca la gente y la filosofía de esa empresa ya que es el editor el que avala la obra con su lectura, corrección y visto bueno. Cuando una obra sale al mercado editada, responde de ella el autor y el editor (los dos). ¿Qué pasa? Que todo eso se convierte muchas veces en negocio: Bohodón, Vitruvio, etc son editoriales donde cualquiera manda un libro y muy malo tiene que ser para que no te den el visto bueno a publicar. Eso sí, pagando primero. En esos casos la figura del editor está devaluada o sencillamente no existe. No avala nada porque lo que quiere es cubrir gastos y ganar algo de pasta. Cuantos más editen, mejor. Así, del volumen, sacan su tajada. El resultado es un montón de libros (poemarios en este caso) lanzados al aire entre los cuales, seguro, hay algunos muy buenos y muchos muy malos.
    3º/ La autoedición. Hay que echarle ganas al asunto. Con tiempo, esfuerzo y amor, seguro que sale algo muy bonito. Y si previamente consigues que alguien con una mediana autoridad en el asunto te revise la obra y te haga una crítica sincera, mucho mejor.
    4º/ El Crownfunding. Lo veo para los músicos, que tienen seguidores, fans dispuestos a apostar por ellos para tener su disco y verlos en directo. La poesía es otra cosa. Por muchos seguidores que tenga tu blog o tu facebook, no creo que reúnas pasta suficiente para publicar sin que te cueste.

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  4. Yo he publicado con ellos y de co-edición nada. Lo que a mí me ofrecieron fue auto edición, porque yo pagaba todos los gastos. Es cierto que no resultó demasiado caro, pero eso, AUTO. Es complejo esto que planteas. Yo no soy escritor,por ejemplo, simplemente un día (por razones que no vienen a cuento) quise editar mis poemas y lo pude hacer. Esto es algo que antes no se podía, ni se imaginaba. Es importante publicar? Pues no para el que no se considera escritor, y supongo que es objetivo del que sí. Lo que ocurre hoy en día es que cualquiera puede hacer casi cualquier cosa, por lo que hay demasiado de todo. También de pseudo-escritores (mi caso). Lo de QVE, mero Marketing, necesidad de nombre. Ellos viven de tipejos como yo y necesitan más y tampoco lo veo mal.

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  5. Hola, somos Ediciones QVE, hemos visto el post y los comentarios y queremos aclarar algunas cosas:

    -NO HACEMOS COEDICIÓN. Somos una editorial que da servicios editoriales. Simplemente damos, a los autores que nos contratan, los servicios de: corrección, maquetación, diseño de cubierta, ISBN (cono código de barras) y depósito legal, impresión y envío.
    Toda la promoción y comercialización del libro corre por cuenta del autor. Nosotros sólo "fabricamos" el libro.
    Y todo eso está claro desde el principio, no engañamos a nadie. Es más, intentamos que los autores, que muchas veces tienen unas expectativas desaforadas sobre su obra, no pierdan la perspectiva, y tratamos de orientarles sobre las posibilidades reales de un libro autoeditado por un autor desconocido.

    -Por esa razón, NO HACEMOS INFORMES DE LECTURA, ni nada parecido, de las obras que maquetamos e imprimimos porque no es esa nuestra labor. No se nos paga por valorar las posibilidades editoriales de una obra, ni nosotros damos a entender en ningún momento que demos ese servicio (podéis verlo en nuestra web, o en cualquier versión en caché de nuestra web) porque nos parece absurdo. Es como si a un fotógrafo le pides que valore si el niño al que va a hacer la foto de la primera comunión o el actor al que le está haciendo un book es guapo o feo. Nadie le ha contratado para eso, le han contratado para que haga las fotos. Pues nosotros hacemos lo mismo: HACER EL LIBRO.

    -No alcanzamos a entender qué hay de malo en regalarle a alguien la edición de 50 ejemplares de su obra (manteniendo el autor todos los derechos comerciales sobre la misma). Simplemente estamos haciendo un sorteo para "regalar" nuestros servicios al ganador, esos mismos servicios que habitualmente damos cobrando. Por supuesto es una operación de marketing orientada a que posibles clientes (gente que tiene libros que editar) nos conozca. Pero no entendemos las connotaciones éticas de la misma. Si una peluquería hace un sorteo para regalar un corte de pelo gratis no habría problema, ¿no? Pues nosotros hacemos libros y regalamos la edición de un libro. No somos Planeta o Alfaguara, somos una editorial que da servicios editoriales y de eso va el sorteo: de regalar la maquetación e impresión de un libro.

    -Por último, sobre lo que es una imprenta y lo que no, etc. La verdad comercial de una empresa la dicta el propio mercado: manteniéndola o borrándola del mapa. La nuestra es sencilla: damos servicios que no da una imprenta (ISBN, por ejemplo), somos un puente entre el autor y la imprenta (y eso lo entenderán aquellos autores que hayan intentado tratar directamente con una imprenta), y por supuesto conseguimos en las imprentas, gracias al volumen de impresión, mejores precios que un autor que acude aisladamente.

    Os agradecemos la atención prestada y el espacio ofrecido para dar nuestro punto de vista.

    Un saludo

    Ediciones QVE

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  6. Qué tiene de malo que cada palo aguante su vela y que cada uno publique lo que le apetezca en ISSUU o donde sea y lo lean sus amigos (sólo los buenos), la novia y la abuela. Creo que es mejor eso a que alguien te diga que pierdes el tiempo (el suyo) y que tu porvenir es calarte una gorra del McDonald's y vender hamburguesas. Ese alguien que en teoría sabe mucho, pero en la práctica sólo sabe vender (y mal). La poesía no da de comer, a no ser que uno empezara a publicar antes de los 80 y/o asaltara niños en Manila. La poesía no es un negocio (afortunadamente). Eso, hasta que a alguien se le ocurra escribir 50 sombres de Grey en verso (libre, por supuesto).

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  7. Joer, cuanto me queda por aprender (como aprender a poner acentos con la tablet). He requerido de google para entender un poco de que lo que hablabas. Al menos a Luna Miguel la "conoci esta semana", por casualidad, chafardeando su blog. Pero de la coedicion, por ejemplo, ni idea (cara vergonzosa del MSN).

    Agradecerte la culturilla general que aportas con gracia sobre estos mundos literarios para que los ignorantes como yo se vayan a la cama con algo mas de sapiencia a sus espaldas.

    Un saludo awi. No sabes cuanto te admiro y respeto.

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  8. No hay nada que reprochar a esa editorial, me parece. Siento curiosidad por saber cuantos de tus libros se venden, por ejemplo cuantos se han editado de "La involución cítrica" y como ha ido la venta. Así nos podemos hacer una idea más clara sobre el mundillo editorial basándonos en estos datos. Gracias por adelantado.

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    1. Mi experiencia editorial es una mierda, por eso me pregunto hasta qué punto merece la pena publicar con una editorial pequeña. La distribución y promoción prácticamente corren de mi cuenta. Me pago los viajes de las (escasas) presentaciones, y bla bla bla. Por eso saco a debate todo este rollo. Porque mi vida no merece la pena. Yo soy esa poeta de provincias que ganó algún premio de mierda a los 13 años y pensó que podía ser alguien, y que ahora se ve colgando poemarios en issuu que no lee nadie, y publicando en sitios pequeños porque no soy lo demasiado buena para que me publiquen las editoriales que molan. Por eso me he apuntado al sorteo de QVE. Por eso me quiero morir.

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    2. Te agradezco mucho la honestidad de tu respuesta. En mi caso, lo cierto es que tengo ganas de publicar un libro en papel, más que nada para poder meter algunos años en una caja, que sería el libro. Me parece que intentar publicar tanto con pequeñas o grandes editoriales, solo me garantiza una pérdida de energía y de tiempo. Por lo tanto QVE por ejemplo me parece una buena opción, sacas 200 libros, e intentas cubrir los gastos o perder una cantidad de dinero aceptable, hasta el siguiente libro. Otro problema que me plateo es qué hacer con esos libros que sobrarían. Donar un montón de ellos a bibliotecas públicas me parece una buena opción (aunque el gasto en correos hay que tenerlo en cuenta). Recuerdo hace años cuando no existía internet y toda la literatura se descubría ahí. Al final, toda esta mierda del facebook, y redes sociales, los blogs, han supuesto la masificación en las vocaciones literarias. Los boy scouts se han hecho poetas, y los domingueros surfistas. La masificación esta en todo, no hay suficientes identidades atractivas para toda esta masa de gente, y al mismo tiempo todo parece accesible a cualquiera (en todos los campos). Eso también explica que existan tantas editoriales, no tengo ni idea pero apostaría a que su número se ha multiplicado mucho en los últimos 20 años. La posición de poetabululu me parece muy acertada. Por lo demás, permite que te de un consejo: revisa tus espectativas, quédate con lo bueno que te da la escritura y aléjate de lo que te amarga. El éxito es algo muy relativo digo yo. Y depende también en buena medida de la ambición de los exitosos, y lo que están dispuestos a hacer por esa ambición. Boris tiene un lifting en el culo, y Espido Freire es así: http://www.youtube.com/watch?v=ZVxFB2yyklo
      Estoy seguro de que piensa que se merece más.
      En fin, mucho ánimo.

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  9. Morirte no, dar caña a esta cuadrilla de pseudo intelectuales de salón llenos de aspiraciones pequeño burguesas, hijos de puta interesados lo que más habita en este mundillo.

    Me ha encantado Awi, qué coño, de hecho: Bravo!

    PD: Autoedición, autoedición.

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  10. Yo he publicado cuatro veces con Bubok, me lo hago todo -con perdón-, incluso la portada es diseño propio. No he tenido nunca ni tengo aspiraciones de vender, se trata de poesía... se trata de poesía mediocre... se trata de ser un aspirante a nada en un universo de aspirantes a "nadas literarias". Al principio me daba un poquito de vergüenza reconocer que me autoeditaba por aquello de pensar: nadie cree en mi ni en mi "enorme potencial" como poeta...snifff... Me sentía inferior a otros a los que sí publicaban otras editoriales, como si yo fuese de otra casta, algo así. Ocurrió con mi primer libro. Después ya no, se me desvaneció por completo esa triste sensación. Ahora puedo decir que estoy orgullosa de mis libros autoeditados, adquiero sólo los que deseo, no le debo nada a nadie, nadie se ríe de mi ni me toma por el pito del sereno, no tengo necesidad ni deseo alguno de ir llamando de puerta en puerta solicitando una limosna, no tengo que mover el rabo ni aplaudir con las orejas si una editorial me impone portada, estilo, etc... y además hace su agosto vendiéndome a mi del orden de unos 200 ejemplares, mientras pone en serias dudas si será capaz de vender uno solo de mis libros a alguien que no sea yo, eso sí... debo pagar, por supuesto, los mil libros que me imprimen -para nada-. Lo juro... ése era uno de los tratos que me han llegado a ofrecer. Con esto queda dicho todo, incluida mi opinión. Nada como la libertad de la autoedición a la carta cuando sabes de antemano quién eres y que no vas a vender nada. Gracias por dejarnos expresar.

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  11. Yo he publicado cuatro veces con Bubok, me lo hago todo -con perdón-, incluso la portada es diseño propio. No he tenido nunca ni tengo aspiraciones de vender, se trata de poesía... se trata de poesía mediocre... se trata de ser un aspirante a nada en un universo de aspirantes a "nadas literarias". Al principio me daba un poquito de vergüenza reconocer que me autoeditaba por aquello de pensar: nadie cree en mi ni en mi "enorme potencial" como poeta...snifff... Me sentía inferior a otros a los que sí publicaban otras editoriales, como si yo fuese de otra casta, algo así. Ocurrió con mi primer libro. Después ya no, se me desvaneció por completo esa triste sensación. Ahora puedo decir que estoy orgullosa de mis libros autoeditados, adquiero sólo los que deseo, no le debo nada a nadie, nadie se ríe de mi ni me toma por el pito del sereno, no tengo necesidad ni deseo alguno de ir llamando de puerta en puerta solicitando una limosna, no tengo que mover el rabo ni aplaudir con las orejas si una editorial me impone portada, estilo, etc... y además hace su agosto vendiéndome a mi del orden de unos 200 ejemplares, mientras pone en serias dudas si será capaz de vender uno solo de mis libros a alguien que no sea yo, eso sí... debo pagar, por supuesto, los mil libros que me imprimen -para nada-. Lo juro... ése era uno de los tratos que me han llegado a ofrecer. Con esto queda dicho todo, incluida mi opinión. Nada como la libertad de la autoedición a la carta cuando sabes de antemano quién eres y que no vas a vender nada. Gracias por dejarnos expresar.

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  12. Nosotros creemos sinceramente que es un problema de mentalidad.

    Hasta ahora se pensaba que autoeditarse un libro era una derrota, pero si se observa atentamente el negocio editorial convencional se aprecia que mucho de lo publicado por las editoriales de prestigio no tiene nada que ver con la calidad de los libros, sino más bien con la capacidad de sus autores de promocionarlos (un famoso tarda 10 minutos en encontrar editorial para su libro porque es famoso); o con amiguismos y mafias (sobre todo en la poesía que vive de las subvenciones de los concursos y las traducciones).

    Tampoco habría nada de malo en coeditar, entendiendo la coedición como un acuerdo entre editor y autor para compartir los gastos de edición de un libro y los beneficios de su venta, siempre y cuando el editor cumpliera con su parte. Porque lo que suele pasar con la mayoría de las coediciones es que al final son autoediciones encubiertas.

    Lo cierto es que los autores que publican sus propias obras son una tendencia que va a más, gracias al abaratamiento de los costes, a las nuevas posibilidades de distribución y promoción, y a los nulos servicios que les aportan las editoriales convencionales. Nosotros conocemos muchos casos de autores que, pudiendo publicar en editoriales convencionales, prefieren hacerlo por su cuenta. Y en Estados Unidos ahora mismo ese tema es un clamor.
    Para comprobarlo sólo tenéis que visitar blogs como el de Konrad http://jakonrath.blogspot.com.es/2010/12/you-should-self-publish.html
    o el de la Alianza de escritores independientes
    www.indiewritersalliance.com
    (Como veis parte del asunto es cambiarle el nombre: en vez de autoedición ahora se llama literatura indie o independiente).

    Y alrededor de todo ese movimiento en ciernes, surgen profesionales o empresas que dan servicios a esos autores (que es lo que pretendemos hacer nosotros).

    Os animo, en fin, a que os planteéis vuestra carrera literaria de otra manera porque se pueden hacer muchas cosas si se escribe bien y se tienen ganas de trabajar en la promoción del libro.

    Un saludo

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  13. Hola, Adriana, por casi-alusiones: en La Bella Varsovia no admitimos manuscritos, de momento, porque tenemos títulos comprometidos hasta finales de 2013 / principios de 2014. En su día aceptamos muchas obras de golpe y, unido a que nos resulta muy difícil cumplir el plan de publicaciones porque el presupuesto no suele llegar, terminamos retrasando algunos libros, y no queremos que nadie tenga que espera más de un año o un año y medio para editar con nosotras, como ya ha ocurrido. En este año, esperamos, volveremos a abrir el plazo de recepción de manuscritos. Un saludo.

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  14. Lo único que sé es que la gente está desilusionada. De la desesperación, a percatarse de la realidad y a tomar medidas: por eso ahora, muchos se abren a la coedición y a la autoedición, porque saben perfectamente que ni las editoriales pequeñas dan a basto (es lógico: son muchos autores, los medios son los justos).

    Es tremendo observar como gente que se encerraba en su idea de: "no quiero autoeditar porque es de fracasados" o "no pienso poner ni un duro para editar porque yo quiero ganar dinero"se han tenido que tragar el orgullo y aceptar la innovación electrónica y digital. Gente que rechazaba tajantemente lo digital ahora se "mata" por publicar y destacar en esta modalidad (gracias al auge de los Ebooks). Si es que los escritores son muy cabezones: que la tecnología no muerde, y que un libro digital puede tener la misma calidad que uno impreso...

    En positivo, esto provoca que algunos que habían permanecido en la postura "soy un purista" (soy escritor = tengo que publicar en papel en una editorial convencional = con tan sólo aportar mi obra es suficiente) se hayan dado cuenta de que hay miles de alternativas para dar a luz su obra y difundirla adecuadamente. El autor deja de ser implicado pasivo para transformarse en parte activa. Internet y la informática ofrece herramientas - y gratis - para conseguir publicar, sea con ayuda de una "imprenta" o empresa de coedición, o con conocimientos propios de diseño - incluso básicos - para editar y colgarlo (o gratis para venta). Hasta el autor que ha tenido la inmensa suerte de publicar a la manera tradicional ha aprendido que no sólo basta con publicar: tiene que preocuparse por la obra, moverla, presentarla. Quien quiera peces, que se moje el culo.

    El negocio de la coedición es respetable, siempre y cuando se estipulen claramente las condiciones de la forma en la que se va a editar (y en el caso de esta editorial, QVE, me parece correcta y una propuesta más, como podría ser otra).

    Lo del sorteo: hay gente que no se lo merece o no le hace falta (como cierto politicucho que, oh, mira por donde, siempre le tocaba algunos décimos del tirón) y son agraciados en la lotería con millones de euros. Eso es el azar: o te toca o no te toca. Y punto. Ahora bien: ¿por qué no acudir a la suerte para que te publiquen? ¿Es que es más aceptable o deseable hacerte amig@ del influyente poeta local de turno para ganarte sus favores aunque te caiga como una patada en el culo (la hipocresía: bandera de muchos escritores), influir en un jurado para que te den un premio, tirar de tus contactos, mediante intercambio de favores, para conseguir sacar a la luz la obra, atosigar con manuscritos a un conocido que sea editor? (Madre mía, es como si estuviera describiendo el modo de funcionamiento de la Cosa Nostra). El mundo literario oficialista es así. Lo dejo claro: para muchos, no hay escrúpulos a la hora de publicar y todo vale. Por tanto... ¿qué tiene de malo agarrarse a la esperanza del azar? ¿No hacemos lo mismo miles y miles de personas cuando compramos un boleto de lotería?

    ¿Qué depositar todas nuestras esperanzas en un papelito es denigrante? Denigrante es la situación actual, que no nos concede una oportunidad, de manera honesta y legal. Y oye, que si te toca un pellizco, bienvenido sea, ¿no?

    En fin, no me enrollo más, es que estos temas me tocan la fibra.

    Un besote.

    ANA PATRICIA

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  15. ...me parece muy acertada esta perspectiva que ofreces adriana; con tu permiso me gustaría difundirla en verSaurios.

    Gsús

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  16. No es algo nuevo... Seguimos viviendo en "Luces de bohemia". Los únicos poetas que podían dedicarse a ello o eran ricos o amigos de alguien rico. Rosalía de Castro ni era introducida en las antologías poéticas del XIX, John Keats murió rodeado de críticos, John Kennedy Toole se suicidó creyéndose un fracasado... y la lista sigue y sigue. Simplemente el negocio editorial se basa en el beneficio y "nosotros" en un criterio artístico subjetivo... solo queda amar la poesía y vivir para ella aunque no te dé nada, buscarse formas alternativas de vida a lo Rimbaud o tener mucha suerte...

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  17. Si alguien que ha conseguido publicar en una editorial (con todo lo pequeña que sea) ser incluída en antologías y varios premios literarios está así, no quiero imaginarme la situación de los que parten de cero en el mundillo literario. Es decir, que en mi caso, me voy suicidando ya...

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  18. Soniditos del ¿messenger? (¿eso todavía existe? se cuelan entre las ondas del programa de radio.
    Hago lluvia de ideas según las cosas que me van surgiendo al escucharte(y alguna se me va a escapar, que estoy pendiente también del fogón) en Fosfatina: Yo, si fuera editorial pequeña(¡toma! ¿cómo se llama lo contrario a la personificación?)y subestimando mucho el trabajazo que eso conlleva, colgaría en alguna plataforma de internet los pdfs de los libros editados antes de morir. Si, no es una solución, y siempre se prefiere el papel(personalmente no llevo bien lo de leer poesía en la pantalla)pero en todo caso se puede imprimir e ir dejando por ahí cual fanzine jajaja
    ¿Y no has pensado en, quizás mas adelante, montar tu una editorial? Ya, es mucho trabajo Aparte, ¿te gustaría? Es más curiosidad que otra cosa.
    ciao ciao

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    1. Hola Mara :)
      El pitido que se hay colado en Fosfatina es del Facebook! No sé por qué razón desde hace unos días me pita cada vez que tengo una actualización nueva. Tendré que cerrarlo mientras emito :)

      Con respecto a las editoriales:
      He de decir que cuando empezó a gestarse el tema de los e-readers y la literatura en digital, y hasta hace más bien poco, la cosa me echaba bastante para atrás. Todo cambió en el momento en que me tuve que ir a Alemania y vi en el e-reader una solución para evitar cargar con todos esos libros y bla bla. Y después de Alemania, ¡el tema de los costes! La verdad es que se agradece que un libro te cueste poquísimo dinero (y incluso nada, en el caso de las editoriales digitales como Groenlandia o Neurótika Books, que ponen sus libros en descarga gratuita) para la gente que nos gastamos tanto en poesía. Así que la idea que propones me parece genial.

      ¿Y lo de montar una editorial? No te voy a negar que lo haya pensado, pero también hay que ser realistas. Y,a parte de la inversión económica que supone, y de la cual no dispongo, volvemos un poco a lo mismo. Que hay muchos poetas, pero pocos lectores de poesía. Hay muchas editoriales de poesía. Muchos poetas. Pocos lectores. Las editoriales caen. Hablaba en el programa de la muerte de DVD, por ejemplos. Vamos, que no creo que mereciera la pena crear otra editorial.

      Besos

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  19. Personalmente, creo enormemente en la autoedición, sea el formato que sea. Personalmente, no creo nada en las editoriales de pago, pues me parecen que son empresas de servicios gráficos, que contaminan el sector. En el caso de QVE... al menos son sinceros.

    Por alusiones y como co-editor de Ya lo dijo Casimiro Parker. Ahora mismo no recibimos originales ya que publicamos una media de 4 libros al año, que es una miseria para todas las propuestas que recibimos (pero es lo que estimamos que podemos abarcar para cuidar la difusión y distribución de nuestros libros, ya que nos dedicamos a la editorial en nuestro tiempo libre o robando tiempo a nuestros trabajos). Tenemos cubierto el plazo de publicaciones hasta dentro de bastante tiempo y no creemos en: "yo te lo publico dentro de 4 años".

    De todas formas quería dejar una reflexión, porque habría que ver en que se basan muchos autores para la selección de una editorial para publicar su libro. Si empleas mucho tiempo en escribirlo... ¿por qué confiárselo a una editorial que conoces por internet y no tienes ningún libro suyo? Luego vienen las malas experiencias con los editores porque no te dan lo esperado, ¿lo esperado o lo soñado?


    En fin, me parece una buena conversación y reflexionar acerca del sector editorial antes de sacar libros como churros.

    Marcus Versus



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  20. Sí, muy buena conversación. Esta bien saber que por vuestra parte no saturáis el mercado sacando solamente 4 churros al año.

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    1. sacando cuatro churros de cuatro de sus amigos. todo un ejemplo de buen hacer.

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  21. Hola. En mi caso cumplo casi todas las pautas expuestas por ti; a saber: Siempre me gustó escribir e incluso algunas personas me decían que lo hacía bien. Pero yo no me lo creía mucho así que dejé pasar cuarenta años para llegar a atreverme a publicar. Durante dos años participé en concursos que no ganaba (incluso el Planeta), y presenté mi obra a innumerables e importantes editoriales que casi nunca siquiera contestaban. Al final conseguí publicar con una pequeña editorial local y desde entonces voy engañando a amigos y conocidos para que compren mi libro.
    Tengo que decir que yo no he pagado nada. Mi editor es un romántico (no entiendo como todavía no está arruinado). La verdad es que estaba obsesionado con publicar, y no de cualquier manera. Me negaba en redondo a pagar, me parecía imprescindible que alguien considerara mi obra lo suficientemente buena como para arriesgar su dinero. Una vez cumplido mi objetivo, la verdad es que he decidido no volver a publicar. Por supuesto seguiré escribiendo pero no estoy dispuesto a hacer de comercial de mi obra e ir por ahí dando el coñazo a todos mis conocidos.
    Tengo escritos docenas de poemas, tres novelas y una multitud de relatos y cuentos. Poco a poco colgaré algunos en mi blog… o quizá no. No tiene ninguna importancia.

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  22. La verdad es interesante lo que expones, con tal de amargar al autor novel, pues yo expongo lo que opino como lector, en cuanto a escritores reseñados Espido Freire no sé quién es, supongo que estos autores van a quedar en calzoncillos, o mejor nadie los recordará. A todo mal escritor le llega su momento, las Editoriales dejan de publicarles y los dejan en el olvido, casos como a la pobre Montse de Paz, esta chica fue ganadora del Monotauro 2011 y a quedado apartada por el mundo editorial. Bueno puestos a verlo mal hay ostias para todos.

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