domingo, 14 de marzo de 2010
Old Enough
Salgo del Concept. Una noche más, en Logroño, he terminado con Elena. Somos las que no envejeceremos nunca. Y ella se parece a Lilly Allen. Más hoy, con su minivestido blanco y negro y esas medias de red que cubren la mitad de sus estrechísimas piernas. Ella se encuentra con su nuevo rollo. Ingeniero esta vez y más guapo que los que le precedieron. Le he dado el visto bueno. Ella siempre espera mi beneplácito en estos casos.
Me veo sola y desubicada (qué raro). Salgo. Lo intento. De camino al guarda ropa, peor que nadar contra corriente como hiciera con Marta y Vecino aquel día. En Donosti. Marea de cuerpos y de fondo música insoportable. In-bailable. In. Impresentable.
Nunca me tocarán más las tetas ni empaparán de tal manera mis caderas.
En el mostrador. Suena una de Shania de Twain. Hacía tiempo. Hace tiempo me encantaba. Mi padre me regaló Come on Over en casette. Una de la veces que me trajo a casa. En un bar de carretera donde él bebió café y yo mosto.
Allí hay un madurito canoso que acaba de entrar. Mientras él entrega y yo recojo me mira. Canto con Shania. Hay que ver. No hay nada más que hacer aunque quisiera.
Al salir. Boina, chaqueta cruzada larga negra de punto. Camisa. Cazadora de cuero negra. Boina. Me pongo los cascos. Suena Fables de los Dodos y un chico grita a su chica que no la perdonará. Que no le ralle, que se va. No quiere saber más de ella. Esto suena a infidelidad (jaja). Compungida, se disculpa, pero no se pone de rodillas y él se va.
Voy. Camino la calle Vara de Rey, desértica, me ampara a todo volumen Old Enough de los Raconteurs y cruzo en rojo todos los semáforos porque soy tan feliz que no me importaría morir a los veintidós.
En casa mi gato.
Ahora, mientras escribo, duerme acurrucado entre mis piernas. Suena mi preferida. Many Shades in Black. Pienso que sólo quiero estar contigo pero no ahora. Mejor cuando vuelva. Si consigo volver y seguir siendo la misma pero mejor, como te mereces.
Ya sabes. Es difícil competir con tu ex.
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la niña de las naranjas by Adriana Bañares is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-No comercial-Sin obras derivadas 3.0 España License.
Entradas y Comentarios
y la ex eres tu :?
ResponderEliminarqué va, qué va
ResponderEliminarjaja
Uf, me deja regusto a melancolía..
ResponderEliminarBesos intermitentes
que bueno adri, de veras, pero todo fue asín?
ResponderEliminarEsa sensación que embarga al caminar por la ciudad con los cascos repletos de música. No sólo escucharla, sino experimentarla con la ciudad. Miras la gente con una canción tristona, un día apagado, nublado, melacólico, y crees aprehender la realidad mucho más tangiblemente que otros días, y se grita en la soledad silenciosa de la música que acompaña. Pero otros días es como tú dices: una avalancha musical energética, reconstituyente le da a uno una visión vital de las calles, de la plaza mayor de Valladolid atravesada en pleno día, sol ardiente.
ResponderEliminarDe lo primero puede ser ejemplo Roads de Portishead ( http://www.youtube.com/watch?v=8us3432lh4M ), de lo segundo All These Things That I've Done de The Killers( http://www.youtube.com/watch?v=sZTpLvsYYHw )