Por dejarme comprar con canciones francesas, vino espumoso y cajas de bombones. Por querer dinero. Por querer dinero. Por querer dinero. Por olvidarme de lo que significan las cosas. Por eliminar a la gente creando mis propios holocaustos privados. Por fumar y decir siempre éste es el último. Por no beber sola. Por hacerlo a escondidas. Por esconderme en moteles donde ni yo misma me encuentro. Por encontrar fantasmas en las carreteras. Por no tener miedo. Por olvidarme del significado de las cosas. Por decirme ahora me pongo y no ponerme nunca. Por quejarme sin saber, sin estar, sin enterarme. Por comprarme un corsé aun no teniendo dinero. Por seguir gastando lo que no me gasto en comida en teñirme el pelo. Por buscar y que me manden buscar en otros sitios. Por mandarlo todo a la mierda. Por empeñar mis poros y desmoronarme. Por descubrir nuevos motes, nuevas metas, nuevas propuestas. Por desentenderme de alguien, por entenderme con alguno. Por ahogarme precisamente ahora que tengo aire. Por envidiar lo que fui antes. Por recostar la cabeza en mi vientre hasta alcanzarme. Por convertirme en espiral y volver siempre al principio. Por regenerarme aun teniendo atravesada la piel en mil caminos. Por hundirme en humo y decir siempre que éste será el último.
.
.
.
.
*La foto la he pillado de aquí.
Una chica valiente que admite que no es perfecta, toda una declaración de intenciones.
ResponderEliminarGracias por la bocanada de aire fresco.
Cariñitos.
por atreverte, qué cojones!
ResponderEliminara la noches brindamos.
abrazos.
d.
que continuidad y que turbulencia tan bonitas!!
ResponderEliminarLa imperfeccion nos hace perfectos... y sobre todo te hace perfecta la aceptación de tus idas y venidas...
ResponderEliminarMe ha gustado esta forma que has tenido de sincerarte ya no solo con los demas, sino contigo misma..
Besos
Yoyo
Voy a ser breve pero conciso.
ResponderEliminarMis líneas de hoy van para tí...
por ser como eres.
Mil besazos