Música
¡Ay...! Qué día más bueno hace hoy, por lo menos por aquí en Pucela. El sol, los pajarillos, los niños. Todo precioso.
Entonces me pregunto por qué me siento como si tuviera una resaca de tres pares de cojones. Sobre todo teniendo en cuenta que ayer estuve en casa como una Santa.
He empezado la semana como si tuviera amnesia o algo así, en serio. Ni siquiera me reconozco a mí misma. Todo lo que hago es como si lo hiciera otra persona. Tal vez sea por eso que me estoy arriesgando a realizar muchas cosas que no hubiera hecho hasta hace una semana.
Me he despertado con ganas de darme otra oportunidad. En relación a la carrera y al rumbo que quiero que siga mi vida, principalmente. Pero no me puedo engañar. No quiero seguir con esta carrera, ni en esta ciudad.
Me he dado de plazo una semana para pensármelo, pero no sé si voy a aguantar. Sé que no es una decisión trascendente. Si quisiera ya la habría dejado, ¿no? Eso es lo que le hubiera dicho yo a cualquiera que estuviera en mi situación, pero detrás hay muchas cosas. Empezando por la familia y toda esa gente que continuamente espera que llegues a ser alguien en la vida. Menuda gilipollez. Ser alguien. Como si no lo fuera sin licenciatura.
Chorradas.
Además, qué cojones, tampoco sirvo para mucho más, ¿no? Me iba a sentir igual en cualquier puta carrera, en cualquier trabajo, y en cualquier ciudad. En todos sitios acabaría por querer esconderme, que es lo que hago siempre.
Creo que voy a empezar a basar mi vida en arrebatos, a seguir diciendo un jueves que aún queda mucho para el viernes.
Nada de planes. Ni esquemas.
Voy a romper todos los filtros de moral que pretendan enturbiar lo que quiero
aquí
y
ahora.
Entonces me pregunto por qué me siento como si tuviera una resaca de tres pares de cojones. Sobre todo teniendo en cuenta que ayer estuve en casa como una Santa.
He empezado la semana como si tuviera amnesia o algo así, en serio. Ni siquiera me reconozco a mí misma. Todo lo que hago es como si lo hiciera otra persona. Tal vez sea por eso que me estoy arriesgando a realizar muchas cosas que no hubiera hecho hasta hace una semana.
Me he despertado con ganas de darme otra oportunidad. En relación a la carrera y al rumbo que quiero que siga mi vida, principalmente. Pero no me puedo engañar. No quiero seguir con esta carrera, ni en esta ciudad.
Me he dado de plazo una semana para pensármelo, pero no sé si voy a aguantar. Sé que no es una decisión trascendente. Si quisiera ya la habría dejado, ¿no? Eso es lo que le hubiera dicho yo a cualquiera que estuviera en mi situación, pero detrás hay muchas cosas. Empezando por la familia y toda esa gente que continuamente espera que llegues a ser alguien en la vida. Menuda gilipollez. Ser alguien. Como si no lo fuera sin licenciatura.
Chorradas.
Además, qué cojones, tampoco sirvo para mucho más, ¿no? Me iba a sentir igual en cualquier puta carrera, en cualquier trabajo, y en cualquier ciudad. En todos sitios acabaría por querer esconderme, que es lo que hago siempre.
Creo que voy a empezar a basar mi vida en arrebatos, a seguir diciendo un jueves que aún queda mucho para el viernes.
Nada de planes. Ni esquemas.
Voy a romper todos los filtros de moral que pretendan enturbiar lo que quiero
aquí
y
ahora.
Hola Adrina,
ResponderEliminarte voy a hacer unos comentarios por si te pudieran ser de utilidad en estos momentos de confusión por los que atraviesas.
Te recomiendo que sigas la carrera por la UNED, aquí veras las asignaturas:
http://portal.uned.es/portal/page?_pageid=93,1023226&_dad=portal&_schema=PORTAL&idTitulacion=34
Donde seguramente te convalidarán lo que ya tengas aprobado.
Yo la hice entera por la UNED (no porque me gustase mucho la carrera, sino porque era la que menos me disgustaba), y he de reconocer que, aunque es más duro y con más asignaturas que en otras facultades, me sirvió de mucho, no sólo los contenidos, que también, sino porque aprendes a tener disciplina y métodología de trabajo, aprendes "por tu cuenta y riesgo", sin tener que soportar necesariamente a alguien que a veces te planteas cómo cojones llegó a profesor. Además, te permite total libertad: la puedes ir aprobando a tu aire y en función de tu disponibilidadd de tiempo, compaginándola con trabajo u otros estudios.
Por otro lado, comparto contigo el interés y gusto por la escritura, y he publicado varios libros, (no de poesía).
¿Sobre Valladolid y Logroño?... Qué te voy a decir que no sepas: son una sobredosis mortal de provincianismo para cualquier persona que no tenga mentalidad poligonera. Pero vivir en Madrid, Londres o Amsterdam es muy caro, y a no ser que seas hija de padres pudientes, o pienses en prostituirte, quedan muy lejos de las posibilidades de la mayoría...
Si necesitas más info. sobre mi experiencia en la UNED, admelo saber
Un abrazo y mucho ánimo.
Hola anónimo.
ResponderEliminaragradezco mucho tu comentario, pero hay dos cosas que me desconciertan:
1) Cómo has sido capaz de escribir varios libros si de repente vas y escribes "admelo" en lugar de "házmelo".
2) Cómo te lo voy a hacer saber si firmas como anónimo.
Por lo demás, muchas gracias por la información. Me meteré en la web de la UNED, y veré si me convence.
También discrepo contigo en eso de que tuviera que prostituirme para vivir en Madrid. Ni que todos los que allí viven fueran duques, no me jodas.
un abracito
Punto uno: los verbos en imperativo acaban en "d": Tomad, bebed, coged...
ResponderEliminarAunque sé que se aceptan las dos formas, prefiero esa, y sí, se me escapó la h, como también escribí "disponibilidadd", acabado en dos "des", entre otras erratas. No pretenderás que escriba igual en un comentario escrito "a toda leche" en un blog que en un libro que he repasado varias veces, ¿no?
Punto dos: Que me lo hicieras saber aquí, en esta página y si no, puedes escribir a la UNED, donde también te informarán.
Lo de "prostituirte" era una forma de hablar sobre lo caro que son esas ciudades. Pero sí te hará falta un trabajo de al menos 1500 euros al mes o, en su defecto, dos de 750 euros.
Por lo demás, perdón si te molestaron mis comentarios, ya me callo.
"a seguir diciendo un jueves que aún queda mucho para el viernes."
ResponderEliminarAlgo tan simple y, a la vez, tan poco común. Te envidio.
PD:http://carte9.dromadaire.com/dromacartes/33199g.jpg
"Cuerpo de perro en el callejón esta mañana. Marcas de neumáticos en la barriga reventada. Esta ciudad me teme. Conozco su verdadero rostro. Las calles son cloacas más anchas, y las cloacas están llenas de sangre, y cuando los desagües rebalsen se ahogará toda la escoria. La porquería acumulada de todo su sexo y sus crímenes les llegará a la cintura. Todas las putas y los políticos miraraán al cielo y gritarán: "¡Sálvanos!"... y yo les miraré y responderé: "No"." (Diario de Rorschach, Watchmen)
ResponderEliminarNada, que si repartieran Premios Novel a los personajes de ficción, éste se lo lleva. Lo traje a la fiesta para que revientes, te lances, o lo que sea, y dejes de pensar y prometer los arrebatos: sólo hazlo, y llena de miedo y rabia y deseo y ansiedad (de ser posible), porque así es más divertido (por lo menos, para quien se lanza)
... en fin, quizá algo de esto te ayude:
http://www.revistakitsch.net/km3.htm
http://elcajondesastre.blogcindario.com/2006/02/00385-los-nadies-eduardo-galeano-micro-cuento.html (esto respecto a lo de ser "alguien")
Bueno, eso.
Te cuidas, niña.
Mira, yo tampoco ando por muy buen momento. Yo tampoco sé si acabaré la carrera aquí, aunque por motivos bien diferentes...
ResponderEliminarTe podría meter una parrafada sobre cualquier chorrada, pero mejor paso al ¡Ánimo! A comernoslos a todos.
Nos vemos.
Estamos pasando por situaciones similares. Estoy pensando dejar la carrera, y eso que estoy en primero... Esperaba de Valladolid bastante más de lo que me ha dado, he dejado una pequeña ciudad y al venir aquí esperaba que fuese una ciudad algo más... nose... ¿cosmopolita? o viva nose que fuese otra cosa.
ResponderEliminarQuiero irme a Madrid pero no tengo ni idea de como decirselo a mis padres o que hacer. Como dicen Vetusta Morla "dejarse llevar suena demasiado bien" y es bastante más dificil de lo que parece.