Estoy muy contenta. Ha sido un fin de semana fantástico. Nos acogió el arcoíris al entrar en el Bierzo, Pat y yo nos abrazamos muy fuerte después de tres años sin vernos y en León viví una de las experiencias más bonitas que me ha regalado esta carrera de fondo que es la poesía.
Gracias inmensas a Magalí, Manuel, a todo el equipo del Urogallo, por haberme invitado y por habernos tratado tan bien.
Recité en el bar El Colibrín, que recomiendo muy mucho, sobre todo si eres vegetariano como aquí la amiga. ¡Todas las tapas son vegetarianas! Es un fantasía y existe, en serio.
Me daba un poco de miedo recitar completo Urbe capensis en un bar y estaba especialmente nerviosa. De hecho, por ahí veréis que me trabo varias veces. Pero vamos, que muy guay. La gente en silencio y sin salir despavorida del bar. Estoy muy contenta, de verdad. Contenta contentísima y súper agradecida.
Además, gracias al festival pude ver actuar a Olaia Pazos, que siempre es un regalo.