El pasado 23 de noviembre, viernes, se estrenó en Granada el documental El Viaje a Budapest, donde aparece vuestra adorada bloguera con peluca fucsia y martini en mano cual diva paria de la poetry under culture retromachine.
A continuación os dejo la entrevista que hicieron a la directora, Dominique Bertholet, en GranadaDigital.com.
Cultura | Esco GD | Granada
“Es un grito de guerra para demostrar de qué pasta está hecha nuestra generación”
Dominique Bertholet dirige el documental 'El viaje a Budapest', que se estrena este viernes en ESCO
Marta Eulalia Martín / ESCO
Dominique Bertholet y Daniel Barredo |
Un fin de semana de junio de 2012, nueve jóvenes artistas se reúnen en una casa con piscina en Moraleda de Zafayona (Granada), rodeados de unos paisajes incomparables y con más de cuarenta litros de alcohol en la despensa. El objetivo es examinar más de cerca a Daniel Barredo, pero también beber, hablar, y en definitiva reflejar las inquietudes de toda una generación.
Este viernes a las 19.00 horas la Escuela Superior de Comunicación y Empresa (ESCO) acoge el estreno en Granada del documental ‘El viaje a Budapest’, un análisis sobre el libro homónimo de Barredo, que consiguió el Premio Andalucía Joven de Narrativa 2011. La directora es Dominique Bertholet, graduada en Periodismo por ESCO. El 90% del equipo técnico de este documento audiovisual está directamente relacionado con ESCO.
Bertholet es una periodista vocacional y graduada, que se siente “muy orgullosa de pertenecer a la tercera promoción (2003-2007) de ESCO porque, para mí, es casi una familia que, incluso años después de haber finalizado mi relación académica con ellos, siguen demostrándome y brindándome su apoyo incondicional”. Asegura que aprendió mucho y conoció a profesionales “maravillosos” durante su periodo en La Opinión de Granada, que acabó con su cierre. También trabajó durante tres años para Riff Raff Entertainment y LNAI Récords, donde “maduré bastante a nivel profesional”, afirma. Su siguiente paso fue un postgrado en Marketing Online a través de la Universidad de Barcelona y OBS. Actualmente es Community Manager Freelance y subraya que es “muy feliz porque hago y vivo exactamente de lo que más me gusta, comunica o muere”, frase que da título a su página web.
PREGUNTA.- ¿Cómo surgió la idea de hacer un documental sobre este libro?
RESPUESTA.- Todo empezó en una mañana de libros y reivindicación, exactamente, el 5 de mayo. Mientras, en Granada, nos manifestábamos contra la precariedad laboral que sufre el periodismo en estos días. En Salobreña, Jesús Lens, director de Comunicación en Caja Granada, presentaba su libro ‘Café-Bar Cinema’. Aquel día deseé tener ‘superpoderes’ para estar en dos sitios a la vez pero, finalmente, tuve que elegir y me quedé con mis compañeros de profesión luchando por un futuro más digno.
Lens me dejó en Salobreña un ejemplar de ‘El viaje a Budapest’ de Daniel Barredo con una dedicatoria irresistible que convertía en necesidad el inicio de su lectura. Aquella novela había ganado el Premio Andalucía Joven de Narrativa en 2011 y estaba firmada por un escritor de Bilbao, sin pelos en la lengua, que tenía unos 30 años y vivía en Cenes de la Vega.
En cuanto acabó la manifestación, me hice un Granada-Salobreña en un ‘pis-pas’ y entonces, me sumergí en aquellas páginas que, desde el prefacio, no sólo captaron mi atención sino que, prácticamente, me hicieron perder la cordura.
Un tipo crápula y soez que hablaba en primera persona y bautizaba al protagonista de su libro con su propio nombre. Intenso, directo, dolido y enfadado con el mundo a causa de la falta de oportunidades que agrede a nuestra generación. Un tipo que vive por y para la literatura, el sexo y el deporte. Un emprendedor, algo extravagante, que consiguió removerme las entrañas desde la página uno…
Devoré aquella novela con cierta ansiedad. La leí de un tirón (son sólo 156 páginas) y una vez acabada, sentí la necesidad de averiguar personalmente, atentando contra esa magia literaria que fusiona realidad y ficción, si de verdad autor y personaje eran sólo uno.
Hablé sobre el libro con Lens, vía Facebook, y él etiquetó a Barredo en uno de mis comentarios. Ahí empezó todo. Nos conocimos, encajamos, me planteó la posibilidad de grabar un documental sobre su novela y enseguida me propuso escribir el guión a medias y que yo misma dirigiera el proyecto. Él lo achaca a mi entusiasmo y yo, a día de hoy, sigo sin explicármelo pero, ¡Aquí está! Terminado y deseando ser juzgado y disfrutado por todos.
Durante el rodaje |
SIN UN CÉNTIMO
P.- ¿Qué anécdotas del rodaje destacaría?
R.- De pre-rodaje, rodaje y post-rodaje ¡Anécdotas hay para aburrir! Pero sinceramente, lo que más destacaría es, sin duda, todo lo que hemos conseguido hacer sin tener ni un céntimo de euro. Rebobiné hacia mi época en ESCO y tiré de agenda para rodearme de grandes profesionales como Fernando Guerrero, que se ha ocupado de la post-producción, Gonzalo Schiaffino, que ha estado detrás de una de las cámaras, Alba Álex, que es un crack en producción, Daniel Izquierdo que es y será un apoyo fundamental para mí, ahora y siempre, además David Tamayo, antiguo alumno de la Escuela Superior de Comunicación Audiovisual (ESCAV), sangre de mi sangre y responsable del sonido y la banda sonora de la criatura, por cierto, ¡Impresionante!, Javier Restoy, tambiénde ESCAV y auxiliar de sonido en nuestro documental, Anita García Ruíz, que nos echó un gran cable en la secuencia que rodamos en Madrid… ¡Nadie ha cobrado nada! Y no sólo ellos, Mariam Martos hizo buenas migas con Alba en producción y supo, como nadie, lidiar con mis nervios en los muchos momentos en los que parecía que todo se nos iba de las manos. Ángel Vílchez fue mi director de fotografía y Molina, cantante de Borriqueros, que fue la única aportación que yo hice al elenco de actores, me hizo el mejor regalo del mundo adaptándose al papel que más me gusta. ¡Lo dio todo!
En este tipo de proyectos, lo más caro es el alquiler del equipo técnico y gracias a ESCO, que nos prestó absolutamente todo (excepto una cámara 5D que conseguimos en Madrid y unas baterías que nos dejó la casa JVC en Granada), salimos súper airosos de la situación.
La moraleja que me queda de todo esto es que, cuando detrás de un sueño hay ganas, constancia y mucho esfuerzo, pase lo que pase, se acaba cumpliendo. ¡No falla! Y que, después de superar tantísimos obstáculos, hayamos logrado un resultado más que digno, de verdad que es una inyección de energía positiva y pérdida de miedo hacia, prácticamente, cualquier proyecto ¡Ahora siento que, si queremos, podemos comernos el mundo de un solo bocado!
P.- El preestreno tuvo lugar el pasado día 12 en Sevilla. ¿Lo presentaréis en otras ciudades además de en Córdoba el 6 de diciembre? A partir de entonces su difusión será gratuita en internet, ¿no?
R.- De momento, no tenemos nada más cerrado y sí, nuestra intención es hacerlo público y difundirlo a través de Internet. Las redes sociales ofrecen un universo infinito de posibilidades, de hecho, el documental fue creado para ello. Esa es su misión: ¡la red! Algo así tiene que estar al alcance de todo el mundo, tiene que recibir críticas de los usuarios, que comenten, que juzguen ellos, que decidan hasta dónde debe llegar, que lo muevan, si quieren, o que lo pongan verde, si así lo consideran. Es un grito de guerra, una patada a lo institucional, a la falta de oportunidades, a quienes se rigen por la ley del mínimo esfuerzo… Ahora tenemos la oportunidad de demostrar de qué pasta está hecha nuestra generación y creo que está claro que nuestra generación actúa en el terreno 2.0.
P.- ¿Vais a presentar el documental en algún concurso o festival de cine?
“SOMOS LA GENERACIÓN MEJOR FORMADA”
R.- ¡Acabamos de estrenarlo! Aún no hay nada decidido pero, no lo descartamos
P.- Los nueve jóvenes artistas que aparecen en el documental disertan sobre el libro ‘El viaje a Budapest’ y muestran sus concepciones sobre el amor, el trabajo o las relaciones sociales. ¿Cuál es el mensaje que se quiere transmitir con este documental?
P.- Alto y claro: somos la generación más formada y mejor preparada de la historia de nuestro país, la primera que nació en democracia y no entiendo por qué los medios de comunicación y la sociedad en general se empeña en colgarnos el San Benito de ‘Generación Perdida’. ¡De eso nada! Somos libres, hiperactivos, tenemos ilusiones y muchísimo que aportar. Nada ni nadie puede pararnos, ni la crisis, ni la falta de oportunidades, ni la desaparición de las subvenciones, ni las zancadillas institucionales. ¡Nada! Somos creativos, testarudos y constantes. ¡Sabemos buscarnos la vida y luchar, con uñas y dientes, por lo que queremos! No tenemos miedo a nada ni a nadie y nos sobran las ganas. ¿Crees que con esta actitud y esta preparación somos una generación perdida? ¡Ni de coña! Es cierto que, viendo y leyendo las noticias, hay gente que pueda sentirse tentada a rendirse, pero te aseguro que ese no es nuestro caso. ‘El viaje a Budapest, el documental’ es un grito de guerra. Estamos aquí y no podrán pararnos. Somos una ‘Generación hustler, underground e independiente’ y llegaremos a donde queramos aunque tenga que ser a través de la contracultura.
P.- ¿Por qué ha escogido crear un documental a partir de este libro y no hacer una adaptación al cine?
R.- ¡Porque somos pobres! Y aún así, sabemos adaptarnos a nuestras posibilidades, haya los recursos que haya… No obstante, ‘El viaje a Budapest’ (la novela) es sólo el primer volumen de una trilogía. ¡Aún faltan dos partes! Habrá que ver cómo evoluciona, qué nos deja este documental y qué opina Daniel Barredo… ¡Yo me apunto a un bombardeo!
PRIMERA VEZ QUE DIRIGE
P.- ¿Es la primera vez que dirige?
R.- Si nos olvidamos de un corto, titulado ‘Juno’, que rodamos en primero de carrera, bajo la supervisión de Rafael Marfil y Manolo Oña, para la asignatura Fundamentos de la Comunicación Audiovisual (y deberíamos hacerlo porque al lado de esto es un chiste malo), sí, es mi primera vez y reconozco que ha sido una experiencia tan intensa como deliciosa que sigo intentando digerir.