viernes, 25 de julio de 2014
OBITUARIO. ADRIANA BAÑARES CAMACHO (1988-2014)
martes, 31 de marzo de 2009
Puñales
y nada tiene que ver con tu boca
que hecha para besar hay veces que muerde
que anuncia cordura y a veces se vuelve loca
Y duele porque la piel no es materia inerte
Duele porque el querer es dolerse a veces.

Ya no es que me lo preguntes tú,
me lo pregunto yo.
Me pregunto hasta qué punto
puedo llegar a odiarme.
No me importa tanto pensar
si te quiero a ti
o escondo en mí tus puñales.
No me importa volar hacia mi límite,
ni llegar a la desidia,
el delirio, mi desdicha.
Ya no creo en tu incondicional
repleto de condiciones.
Sólo creo en tus prejuicios
que acomplejan lo que antes para ti
eran mis virtudes.
Me rechinan los dientes si pienso
por un solo momento
en comerte a besos. No quiero.
No me llaman tus labios, ni tu cuerpo.
Me preguntas por qué
ya no digo “te quiero”.
Si supieras que me reprimo
para no decirlo
después de cada orgasmo
que ya no vivo contigo...
Y no es un sustituto,
ni un amante,
ni soy yo.
Como tampoco volverás a serlo tú.
Ahora me pregunto
si en verdad algún día lo dije,
si realmente lo sentía
o era pura necesidad.
- La foto esta´ sacada del filme La Chica del Puente.
jueves, 26 de marzo de 2009
poco a poco

En el baño pone “toros=tortura”. Me hace gracia porque dentro del continente hay papel higiénico y sé que estoy a salvo porque soy la única mujer del bar. Y me rio un poco, porque suena Facto Delafé. Y las flores azules, por supuesto… Tarareo descompasada una canción de Christina Rosenvinge. Del último disco, porque sé que no le gusta a la mayoría de los popis. Por alguna razón se sienten traicionados. La razón no la sé, por eso digo que es extraña. No, no lo he dicho, lo digo ahora. La cuestión es que me estoy riendo sola mientras meo aquí dentro. Fuera de aquí esta´ lloviendo, y tampoco está tan fuera, porque estoy dentro de un patio. Lo sé, es extraño, pero eso no lo he dicho yo, lo piensas tú, y sinceramente, aunque me estés leyendo, me importa una mierda lo que pienses. Lo sé, a ti te importa una mierda lo que escriba, ¿no? Pero aquí estás, haciéndolo. Haciéndotelo. Lo sé. No me preguntes por qué. Tengo un sexto sentido para estas cosas.
Sólo quiero tener una conversación al salir de aquí. Poder decir más de dos palabras seguidas, llevarme un cigarrillo a la boca y sonreír con los ojos cerrados. Quiero comerte a besos, pero todavía no. No, todavía no. Seamos cautos. Seamos castos. Seamos pastos, pasto de la locura, comernos como animales, rumiarnos, lentamente. Quiero disfrutarte. Poco a poco,
poco a poco,
poco a poco.
No tocar: red de alta tensión.
la niña de las naranjas by Adriana Bañares is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-No comercial-Sin obras derivadas 3.0 España License.